En tertulias 2.0 nos preguntamos: ¿por qué las autoridades venezolanas eluden explicar el asunto de la dolarización de facto
de la economía venezolana, así como el estatus de los planes de independencia financiera/energética sembrada y defendida por el comandante Chávez?.
En estos dos años de gobierno chavista se hacen
pronunciamientos que se entienden van de la mano con lo planteado en el Plan de
La Patria y -mas aún- con los proyectos desdolarizantes del presidente Chávez.
Lamentablemente la pésima política comunicacional de la revolución hace que estos
anuncios se diluyan en burocracia, corrupción e ineficiencia, incomprensible
cuando nuestra revolución propugna lo opuesto.
Tenemos una hipótesis y es que el “rabo de paja” hace de las
suyas y no deja avanzar.
Ante la manipulación financiera y energética de occidente,
donde es manipulado desde el precio del oro hasta el petróleo -pasando por tasas de interés-, se hace imperativo tomar medidas económicas audaces e innovadoras para protegernos de la onda expansiva que generará la explosión de la burbuja de dólar. Hasta ahora los grandes capitales son los
únicos beneficiados de esta espiral especulativa en detrimento de pueblos enteros.
¿Cuál ha sido la respuesta de algunos países para contrarrestar
este genocidio financiero?. Antes lo llamaban devaluar la moneda, hoy se le conoce
como “dejar flotar la moneda” o “abandonar la paridad con el dólar”.
Si Venezuela está en la búsqueda de su independencia económica/energética/financiera
no puede ni debe seguir atada al dólar de los estados unidos.
En teoría las reservas en divisa deben estar vinculadas a la actividad comercial con sus socios internacionales.
En Venezuela le tenemos terror a la palabra devaluar, lo asociamos negativamente. Queremos
A JURO tener un bolívar “fuerte”, sin embargo es una realidad que el poder
adquisitivo de nuestro bolívar no es el que queremos ni el que tenemos.
Existe un cóctel de beneficios traducidos en subsidios directos e indirectos que se han prostituido y no cumplen su cometido, en
algunos casos se han convertido en fuente de corrupción, de traición y de
empobrecimiento del patrimonio de nuestro país.
El problema justamente radica en tener un dólar “barato”.
El cadivismo no solo se ejerce con los 300 dolares de la
tarjeta de crédito. El cadivismo grandes ligas lo hacen los burócratas a través de sus intermediarios en negociaciones entre países (en dólares), las trasnacionales para burlar el control de cambio, en fin, casi todos los que reciben dólar preferencial.
Los corruptos en el entramado comercial del dólar a 6,30
hace un agosto con esta tasa. Es un secreto a voces, son hechos públicos y notorios.
Dejemos flotar nuestra moneda. El Estado podrá seguir importando las medicinas, alimentos y todo lo que -por ahora- no produzcamos en el país y sea de primera necesidad. ¡Lo subsidiará EN BOLÍVARES!.
La ventaja es que ya no será negocio la especulación. El que
quiera importar en vez de producir en el país lo tendrá que hacer a una tasa de
verdad “justa”.
Abandonar la paridad con el dólar creará un muro de contención y
protección a la producción nacional.
Rusia, por ejemplo, ha desanclado su moneda del dólar dejándola
flotar, o como decíamos antes, ¡la devaluó!, sin miedo, ¡si, la devaluó!. ¿Qué logró
con eso? Potenciar la producción nacional. Hacer mas competitivo sus productos en el mercado internacional. ¿Por qué es tan difícil que nuestros
líderes lo entiendan?.
¿Saben quienes adversan esta decisión profundamente nacionalista?, los corruptos (propios y extraños) que verán mermados sus ingresos turbios. ¡Ojo con eso!, este delito es -entre otros- genocidio. Los corruptos de la especulación financiera juegan a hacer quebrar nuestra economía y matar al pueblo de hambre. ¡Muy peligrosa esa deformación moral!.
Mientras tengamos deuda en divisa denominada en dólares, aderezado con un precio del petróleo en mínimo histórico, debemos potenciar el comercio bilateral en monedas propias y/o utilizar los mecanismo existentes SUCRE y ALADI como ÚNICO medio de pago, así como innovar con los SWAP financieros para diversificar nuestras reservas internacionales y poder honrar nuestros compromisos internacionales en esas divisas. Los dólares petroleros -por ahora- deben orientarse (lamentablemente) al servicio de la deuda.
Esto lo sabe el alto mando político. ¿Por qué no
hacen nada en ese sentido?, ¿Por qué no hablan sobre ese asunto?, ¿Por qué mantienen
la dolarización?. Parafraseando al profesor Lupa: misterios de la ciencia.
Cuando leímos la noticia que Venezuela quiere certificar
sus reservas auríferas y de otros minerales escasos en el arco Gran Magna Reserva Minera nos invadió el júbilo. Al saber que los Chinos serían nuestros socios en la explotación y refinación de oro disminuyó nuestra incertidumbre. La aprobación en Ley habilitante (aunque no conocemos su contenido) de la reforma a la Ley en esa materia nos invita a concluir que la explotación del oro y su posterior venta
al BCV reforzarán nuestras reservas internacionales. Pero esto es a
mediano plazo.
En 2016 ¿Cómo vamos a mantener las misiones sociales con un
presupuesto deficitario?. Recordemos que el presupuesto de este año se calculó a 40 dólares por barril. Para hoy 2 de enero ya acumulamos 2 días de déficit. Seguir imprimiendo billetes para complacer el fetiche del dólar barato es suicida.
Hay que devaluar, dejar flotar, abandonar la paridad con el dólar o como lo queramos llamar.
No es negativo ni contrarrevolucionario, ni traición.
Con mas bolívares podremos financiar la inversión
social que adelanta la revolución sin necesidad de acudir a la emisión de dinero inorgánico. Un dólar "caro" le pondrá las cosas mas difíciles a los
corruptos, evitará la importación de productos suntuosos privilegiando la producción nacional y forzará al gobierno a
perfeccionar los subsidios actuales.
Compatriotas, aquí lo importante es la revolución. Estando “en
revolución” es como podremos proteger a la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela y al Plan de La Patria.
#DesafíoDeTodos.
Fernando Luis Vegas
@fvegas15
"Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo"
Albert Einstein
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